domingo, 13 de enero de 2008

Paladar negro

Madama en Rojo era profeta en su Tierra, la población entera sabía de sus nobles facultades. Y no le quedaba holgado basto reconocimiento, fueron las delicias de su arte las que la arrojaron a la fama. Ella misma era capaz de transmitir docenas de imágenes en pequeños bocados, sabía bien cómo hacerle entender al gentío cada una de sus corazonadas. Pura canela y licor, dulce señuelo de la antropófaga sensación. Piel de chocolate, sudor de anís, Venus de coco fresco, textura de dulce de leche. Suave y con final feliz. Adictiva y empalagosa. Jalea de frutos del bosque.
Amaba con locura, tal como si el bobo diera sus últimos latidos.
Amarga desazón de la desgracia.
Como al otoño las aves migratorias padecía cada idilio. Moría y nacía reiteradamente.
Lo analizó conmovida lo que dura una vida confitada. Reunió sus mejores ingredientes, mezcla traiciones en grageas de los más recónditos lugares del globo; finos licores; chocolates suizos;
cianuro espumoso.

2 comentarios:

Amiga Portátil dijo...

no te puedo!

Anónimo dijo...

hasta caterva no paramos.